¿Prisión o libertad?
Esa es la cuestión. Somos nosotros los que decidimos cómo vemos lo que nos toca. SI lo vemos como una cárcel o como una posibilidad para liberarnos. Te cuento mi experiencia.
Hay momentos que me siento presa de la decisión que tomé de estar 24/7 con mi hija y sus necesidades.
Te pongo un ejemplo.
2 veces por mes voy a colaborar con un hogar de niños que está relativamente cerca de mi casa. Y cuando voy solo estoy dos horas o menos.
Pero hace 4 meses que no puedo ir.
Por la mañana la llevo a un centro educativo terapéutico, pero tengo que quedarme a esperarla por diversos motivos que ya contaré. Al mediodía volver con ella, almorzar e ir a la escuela.
Y por la tarde, como Paloma no tiene acompañante en la escuela todavía, y nunca sé cuanto tiempo va permanecer, no puedo contar con esas 2 horas 2 veces por mes para cumplir con un compromiso que tengo hace años. 🤷🏻♀️
Luego de eso, las terapias. Y así.
O por ejemplo cosas básicas como comprar un regalo para alguien que cumple años, tomar un café con una amiga, ir a visitar a algún familiar, ir a un cajero a sacar plata para tener efectivo a mano cuando ella me pide algo del kiosco, etc.
Y vos me dirás, “pero el que trabaja en relación de dependencia está igual”.
Y si, es verdad. Por eso hace un tiempo entendí que soy yo la que elijo si esto lo quiero ver como una cárcel o como libertad.
Porque en algún punto para mi fue la excusa perfecta para cortar con las ataduras de un trabajo en relación de dependencia, tener jefes, hacer lo que otro quiere que yo haga, para empezar a crear lo que yo quiero, aprender lo que a mi me gusta y tomar las decisiones por mi misma.
Y eso se siente libre.
Porque la verdadera libertad es la del ser.
Gracias a esta realidad que me tocó, pude desarrollar nuevas habilidades, como diseñar paginas web, crear nuevos negocios online, generar estrategias de marketing, hacer desarrollo personal, meditar, entrenar, conocer la biodecodificación, aprender nuevas herramientas para mi trabajo como psicóloga, y mucho más.
Y ni te cuento lo que aprendí de la maternidad!… bueno, eso te lo cuento en otro correo/post.
Y vos ¿te sentís libre?
PD: Compartí este mail con otras personas porque me ayudaría a dar este mensaje a más madres que a lo mejor les pueda servir
Y si te reenviaron este mail: